Introducción del texto redactado por la Sociedad Española de Sanidad Ambiental:
Una de las funciones fisiológicas básicas para la vida es respirar. Las personas respiramos una media de 15-20 m3 de aire al día. Si este aire se encuentra contaminado, inevitablemente incorporaremos a nuestro organismo esas sustancias contaminantes.
Los entornos urbanos de las ciudades, tanto de países desarrollados como en vías de desarrollo, soportan un tráfico desmedido que contribuye a deteriorar la calidad del aire. Además del tráfico, también la industria y las calefacciones son fuentes relevantes de emisión de contaminantes.
A modo de ejemplo, en la Comunidad de Madrid el sector transporte es el emisor del 48% de partículas, el 70% de los óxidos de nitrógeno (NO2) y el 78% del monóxido de carbono (CO). El sector industrial es el responsable del 62 % de la emisión de óxidos de azufre (SO2) y del 64 % de los Compuestos Orgánicos Volátiles (COV) entre los que se encuentra el benceno, el tolueno y el xileno. Las calefacciones contribuyen a la emisión de óxidos de azufre (SO2) en un 31 % y a partículas en menor medida.