Han pasado ya casi 12 años desde que la Administración General del Estado Español legislara la Evaluación de Impacto en Salud (EIS en adelante) como principal herramienta para introducir la Estrategia de Salud en Todas las Políticas. Así, desde que se promulgó la Ley 33/2011, de 4 de octubre, General de Salud Pública, las CCAA tienen el deber de someter a EIS todas aquellas políticas, proyectos tanto públicos como privados y actividades, cuya implantación se prevea puede tener incidencia en la salud humana.
La EIS se concibe como un conjunto de herramientas que persigue el análisis y valoración de impactos potenciales en la salud y su distribución en la población afectada por la implantación de estas actuaciones. Tiene como finalidad, la incorporación de las medidas necesarias para eliminar o reducir hasta límites razonables los efectos negativos y reforzar los efectos positivos.
No cabe ninguna duda de las consecuencias en términos de mejora del estado de salud de la población y ahorro de costes asistenciales para el Sistema Nacional de Salud que supondría la implantación efectiva de esta herramienta en el estado español, pero tampoco, de las dificultades y retos que su consecución lleva consigo. En este sentido, deben ser tenidos en cuenta en el proceso de toma de decisión, numerosos aspectos de tipo conceptual, técnicos o metodológicos, que a día de hoy no están resueltos.
Y es que esta dificultad hace tiempo que está siendo percibida por las CCAA como consecuencia de la publicación de la Ley 21/2013, de 9 de diciembre, de evaluación ambiental. La citada Ley da un paso más dentro de una regulación sólida y consolidada como es la de evaluación ambiental y contempla la obligación por parte del órgano ambiental de consultar a la administración sanitaria sobre los posibles efectos significativos directos o indirectos para la población y salud humana dentro de los procedimientos de evaluación ambiental a los que debe ser sometidas una gran variedad de actuaciones con incidencia ambiental. Se trata de una nueva e importante responsabilidad que recae en los centros directivos competentes en materia de salud pública para los que aún no existen recursos técnicos, materiales y humanos.
No obstante lo anterior, tanto la publicación de esta Ley, al establecer un pronunciamiento desde el punto de vista sanitario en un procedimiento administrativo ya establecido donde podría incardinarse la EIS, como la publicación del Plan Estratégico de Salud y Medio Ambiente (PESMA en adelante) al contemplar su desarrollo legislativo y la elaboración de protocolos que armonicen su aplicación por parte de las CCAA, abren la posibilidad y establecen una importante oportunidad para avanzar en la implantación de esta metodología.
La Sociedad Española de Salud Ambiental (SESA) no es ajena a lo anterior y por ello, ha visto oportuno organizar su 30 jornada técnica con el lema “Evaluación de Impacto en Salud en España: retos y oportunidades”. En estas jornadas, se darán cita expertos, responsables y representantes de las principales administraciones públicas y actuaciones afectadas, con el objeto de analizar y debatir de una parte, las principales dificultades y elementos clave de éxito de las contadas experiencias que existen en la aplicación de esta herramienta actualmente, y de otra, para obtener conclusiones que puedan servir como punto de partida para la consecución de los objetivos marcados por el PESMA en esta materia.
Qué actuaciones deben someterse a este procedimiento y la obligatoriedad o no de hacerlo; qué metodologías de análisis de impactos por determinantes en la salud nos permiten cuantificar aquellos que son significativos de los que no; cómo abordar el análisis de su distribución en la población, evitando inequidades, y por tanto, teniendo que identificar caso a caso la presencia de grupos de población vulnerables afectados; cómo sistematizar este análisis a través de procedimientos ágiles que no supongan retrasos y limitaciones injustificadas en la creación e impulso del tejido empresarial, o cómo debe organizarse la administración sanitaria para dar respuesta a esta importante demanda, son algunos de los retos que presenta la implantación de esta herramienta en España y que sin duda alguna serán abordados en estas jornadas.
Junta directiva SESA
